lunes, 9 de junio de 2014

Comienza la temporada de tomates alemanes

Este fin de semana, como la gran mayoría, Manuela ha decidido el plan, pero esta vez era especial, ya que el viernes, fue su cumpleaños.

El sábado hizo un día de verano estupendo, que poco a poco se fue convirtiendo en un infierno abrasador cual día de agosto madrileño. Para hacer un poco de ejercicio decidimos bajar a Munich en bici con el objetivo principal de comprar unas lanas. Es un placer montar en bici con esta temperatura al lado del río y a la sombra del bosque que cada vez está más frondoso. Dan hasta ganas de bajar al río a darse un chapuzón.
Como salimos tarde de casa, fuimos directamente a comer. El sitio elegido era un restaurante chino dedicado exclusivamente a dim-sum. Pedimos unos de carne y otros de verduras y setas, los dos tipos a la plancha, y estaban buenísimos. Y de postre un dim-sum relleno de engrudo dulce con salsa de mango, no tan buenísimo. El sitio se llama LeDu y es un mini local con dos mesas para 8 personas, muy limpio y agradable. Aquí se lleva mucho lo de compartir mesa, te sientas donde haya un hueco y a comer. Está bien porque así puedes ver lo que han pedido los de al lado sin ser muy descarado.

Restaurante LeDu

Al terminar, volvimos a montarnos en las bicis y nos acercamos a una oficina de BMW a hacernos socios de una movida que se llama Drive Now.
¿Qué es esto? Pues es una especie de alquiler de coches por minutos. Por las calles de Múnich, en la zona de la universidad al lado de casa y en el aeropuerto, hay coches aparcados para poder alquilarlos. Con 29€ de pago inicial y después de registrarte, te dan una tarjeta con la que puedes abrir y arrancar todos estos coches. Entonces si quieres coger un coche, abres la aplicación del móvil, lo reservas, te acercas donde esté y ya es tuyo. A partir de ese momento pagas 0,32€ por minuto. Todo está incluido el seguro, la gasolina, el aparcamiento... Aun tenemos que probarlo pero creemos que a nosotros nos viene muy bien para ir y volver del aeropuerto, por menos de 10€ por trayecto. Ir en transporte publico son más de 15€ por trayecto (cogiendo primero un bus y luego el tren, que dependiendo de la hora no hay buenas conexiones entre ambos) y el taxi pues como 40€ a casa y 60€ al centro y la última opción que era la que pensábamos hacer, aparcar el coche en el parking del aeropuerto 49€ una semana. Así sobre papel suena bien, tenemos ganas de probarlo a ver que tal funciona. Los coches son Minis, BMW serie 1 y el nuevo BMW Active eléctrico, que será uno de los primeros que cojamos.

BMW Active E aparcado al lado del trabajo de Manu

Después ya fuimos a por las lanas y, por supuesto, a pagar el impuesto por haber bajado a Múnich en la tienda Milka. Los ganadores de esta semana son trtrtrtrtr...

Milka con lacasitos alemanes y Milka con brezel

Ya para terminar nos compramos unas cocacolas y nos sentamos un ratito a la sombra en el Englischer Garten. Hacía un calor terrible, casi daban ganas de coger la bici y meterte en el fresco bosque de vuelta a casa.

En este punto igual os estáis preguntando ¿dónde están esos tomates alemanes que dice el título? pues aquí vienen!!
En cuanto comienza el mes de Junio y se empieza a notar en las temperaturas que el verano está muy cerquita, empieza aquí en Munich la temporada de los tomates alemanes. Cientos y cientos de campos llenos de ellos, se ven por todas partes. Cualquier rinconcito bien despejado de árboles es un lugar perfecto para plantarse y que se coloreen hasta que estén a punto. Bienvenidos al Benidorm de Alemania en el centro de Munich.

Englischer Garten

Es increíble la cantidad de gente que había por todos lados tostándose al sol, bañándose en el río o luciéndose. Todo el mundo en bañador y en biquini como si estuvieran en la playa. Se veía más color carne, que color verde en las praderas. ¿Creías que lo de buscar el hueco en la playa lo más pegado a la familia de al lado era algo español? Pues, o lo han aprendido muy bien, o lo han inventado ellos. También pensaba yo cuando les veía rojos como tomates andando sin camiseta por cualquier paseo de puerto de Levante: Pobres, como no tienen sol allí en Europa, pues se queman... Y qué va!! Se queman porque les gusta, porque aquí más de uno iba a dormir calentito unas cuantas noches y ya debería estar escarmentado por años.

Para continuar viendo a los tomates alemanes, el domingo fuimos al lago Feringasee a comer. Preparamos una paellita de pollo en casa, una media hora de bici, una pequeña sudadita y al Biergarten a comer con una cervecita fresquita.
Todo el lago está rodeado de praderas con árboles grandes con mucha sombra. El sitio está bien, hemos estado en una zona que había poca gente y se estaba agradable, pero la zona más próxima a los parkings y al biergarten principal son un poco demasiado, mucha mucha gente, muchas muchas barbacoas y mucho mucho asquete.

Comida rica

Panorámica de nuestra zona

Otra del laguito

Y por último, para terminar con la fritanga alemana, hoy lunes, que aquí era fiesta, nos hemos ido a la piscina. El primer intento ha sido a una piscina muy grande descubierta que hay en el centro. Como somos unos listos y nos seguimos creyendo que esto de verdad es la Europa prometida, donde todo es diferente a lo que pasa en España, pues allá que nos hemos ido, no del todo conscientes de que allí nos esperaba. Media Alemania, vamos, abarrotada como cualquier piscina de barrio en Madrid el día más caluroso del año. Así que al ver la larga cola que había sólo para entrar, nos hemos ido a comer una pizza y nos hemos venido hacia casa.
Algún día haré una entrada de los mitos alemanes, me niego a que la gente siga pensando que son mejores que nosotros.

Al final nos hemos venido a la piscina del pueblo de al lado del nuestro a la que voy a nadar un par de días a la semana. Es cubierta pero tiene un solarium en la terraza de arriba que se está la mar de bien. El complejo tiene una piscina de 25 metros con 5 calles, una piscina profunda con trampolines de diferentes alturas, un tobogán gigante, una piscina de niños, otra de bebes, y por último una piscina spa con corritos y burbujas. La piscina es nueva, la terminaron de remodelar el año pasado y está impecable.
Y ya aquí nos despedimos de este fin de semana largo, viendo el último tomate frito, una chica que debía tener otra piel en casa para cambiarse cuando llegara porque a pesar de tener un rojo vulcánico en todo su cuerpo, seguía tomando el sol como si nada... (Las fotos de la piscina no son mías, hay poca gente normalmente pero alguien hay jeje)

Piscina de nadar

Piscina de masaje

Por motivos de privacidad y sobre todo para no ofender a mis lectores he decidido poner pocas fotos :-).